La Pascua es un tiempo para acercarnos más a Jesús y para
vivir la alegría que Él nos da. Hoy el Señor Resucitado nos ha invitado a vivir
muy unidos a Él, como el sarmiento está unido a la vid. Cada vez que celebramos
la Eucaristía fortalecemos y renovamos esta unión. Y Él viene a nosotros, nos
limpia, nos poda y nos llena de vida, para quedemos frutos abundantes para
nosotros y para nuestros hermanos.
El Equipo de Cáritas sigue invitándoles y animándoles a la
reflexión. En esta ocasión hemos elegido una frase de un gran teólogo y santo,
San Juan Crisóstomo: “Te preocupas de adornar la Iglesia y no el cuerpo de
Cristo que tiene hambre”. Es contundente
el mensaje que nos transmite esta frase pero a la vez profundo para meditar.
Nos preocupamos excesivamente de lo exterior y no de encontrar a Cristo en el
hermano. Como dice Jesús en el Evangelio de San Mateo para comparar a los
fariseos con sepulcros blanqueados, relucientes por fuera, pero llenos de
podredumbre en su interior. Jesús denuncia el pecado de la hipocresía, cuando
aparentamos por fuera lo que no se es por dentro. Aparentemente cumplimos con
los preceptos de la Iglesia, pero nos olvidamos de uno de sus pilares
fundamentales: La Caridad. El encuentro con Dios no es un verdadero encuentro
si no nos lleva al hermano más necesitado, en palabras del Papa Francisco.
Presumimos con frecuencia en nuestra Iglesia, lo formados y preparados que
estamos, todo lo que colaboramos, todo lo que rezamos, en definitiva,
cumplimos. ¿Pero dónde entra en todo esto el hermano más necesitado? ¿Olvidamos
lo que Jesús nos dijo: lo que hicisteis a unos de éstos, mis hermanos, a mí lo
hicisteis?
A continuación informamos de los hermanos atendidos durante
el mes de abril. Se ha ayudado en alimentos a seis familias de nuestro pueblo,
por un importe de 205 € y dos familias han sido ayudadas en el pago de recibos
de luz por un importe de 137 €, ascendiendo a un total de 342 €. La colecta del
mes de abril fue de 58,90 €, siendo nuevamente inferior la aportación de
nuestra parroquia a las necesidades de nuestros hermanos.
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